Los comentarios serán de lo más variados y las hipótesis sobre la conducta posible de Grecia de aquí en más tendrán diversos tonos y fundamentos.
Pero lo que es indudable y no admite opinión en contrario es que lo que se instrumentó para "ayudar" a Grecia es un default con asistencia europea pública y privada cuyo resultado final aún no esta claro.
Quizás fue un remedio para posdatar una situación caótica inminente en Europa que con este acuerdo de urgencia pone en un futuro mas prolongado la inevitable crisis europea.
Fitch Ratings afirmó hoy que el plan instrumentado por los líderes europeos es un "default restringido".
Ante la pérdida del 20 % del valor presente de la deuda griega por parte de sus actuales tenedores, Fitch afirmó que "cualquier cambio que altere los términos contractuales originarios de los títulos, con una cesión soberana, constituye técnica y fácticamente un default."
Una vez realizados los canjes de títulos correspondientes con la alteración de los términos contractuales originales la deuda griega será sometida a las peores calificaciones por parte de las agencias crediticias, impidiendo así su uso para muchas transacciones y como garantía bancaria en operaciones de crédito.
Todo indica que este default asistido permite una pausa muy breve en un proceso más largo que en los próximos días contará con nuevos protagonistas y nuevos escenarios.
Jorge Taboada
22 de Julio de 2011
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